El muñeco de apego, también llamado objeto de apego u objeto transicional, es un objeto material en el cual el bebé deposita cierto afecto.
Este objeto cumple algunas funciones psicológicas muy importantes, por una parte es una fuente de placer y seguridad cuando la madre (o la figura de apego principal) no está. Por eso, a menudo el niño lo busca cuando necesita consuelo, cuando debe afrontar situaciones nuevas o cambios, como las primeras etapas de la escolarización o en el momento de empezar a dormir solito. Además le permite construir un área intermedia entre él y la realidad, entre él y otra persona.